la fuerza del tai-chi.

Hace ya algunos años, comencé a hacer tai-chi, estaba yo muy mal, con mucha ansiedad y problemas varios y mi hijo, que para mi siempre ha sido un angelito, me llevó a un grupo en La Laguna.
Así empecé yo , en esta disciplina que sigo practicando después de unos cuantos años.
He logrado mejorar mi estado de salud física y emocional, estoy más centrada, he tomado decisiones duras pero necesarias, y duermo mucho mejor.
Aparte de todo ha mejorado hasta mi densitometría. Tengo entendido que hay estudios que lo recomiendan para gente mayo, pues ayuda a equilibrase y a no caerse y si esto ocurre a caer mejor; ya que  en cuanto empezamos a envejecer, solemos caernos más, por distracción o por falta de equilibrio...
Otra de los beneficios del tai-chi, es aprender a relajarnos y a centrarnos en el momento en el que estamos; es decir estoy fregando y no pienso que voy a hacer después o que me pasó ayer, solo pienso en el agua limpia que corre y se lleva la basura de los platos.
También he aprendido a respirar, esa respiración maravillosa que tienen los niños y que luego perdemos: respiración abdominal  en la que llenamos de aire nuestro abdomen, para luego expulsarlo totalmente y hacer que nuestro chi (energía) recorra nuestro cuerpo.
El tai-chi, unido al chi-kung , es una herramienta maravillosa para mejorar nuestra salud, lo digo desde la práctica continua y la experimentación en mi misma de sus beneficios.
Yo hago la forma SUN, muy antigua y que me ha llevado tiempo aprender, pero hay otras formas, muchas.

Siempre estoy indagando en nuevas formas y no dejo de aprovechar cualquier oportunidad para ahondar en esta disciplina. Se lo recomiendo a todo el mundo, es fácil de hacer y merece la pena.